Vermú Casa Mariol. ¿Qué bebemos hoy?
Ruth de Andrés | 8 octubre, 2016
El vermú de Casa Mariol con sus aceitunas y un twist de limón nos recuerda con nostalgia las tienditas de vino tan típicas de los barrios barceloneses. El origen de esta peculiar casa.
¡Hola Vinistas! Hoy vengo a hablaros del vermú Casa Mariol. Si hay algo típico de Barcelona son las bodegas de vino a granel, los cellers del barrio. Con todas aquellas pipas de vino: blanco, rosado, tinto, más dulce, más seco, licoroso, moscatel… Y por supuesto, mistela y vermús. La gente se acercaba prácticamente a diario a estas ventitas con su botella y se la rellenaban del vino que llevaban comprando años. O de una mezcla (barreja) de vinos: un poco de Tarragona, un poco del Empordá y un chorro de Priorato para dar color. Gente de costumbres acostumbrada a su propio vino de la casa. Nunca mejor dicho. Creado para ellos. Suena a lujo pero era pura rutina. Muchas de estas tienditas de barrio han desaparecido. Casa Mariol apuesta por esa filosofía. Y sigue siendo una tienda así de nostálgica. En su afán por reinventarse embotellaron vinos, diseñaron etiquetas retro que recordaban a aquellas épocas y se lanzaron a vender esos vinos y su famoso vermú por todo el mundo.
Elaboración.
Basado en la tradición de esta bodega y, como todo buen vermú, se macera con hierbas aromáticas de la comarca y frutas. Os lo recomendamos con unas aceitunas arbequinas, como no podía ser de otro modo, y un twist de limón. Un vermut o vermouth en francés, con aire de verbena para bailar o simplemente para gozar. Y en versión BaginBox de 15L si de verdad sois de verbena con muchos amigos.
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